El aire acondicionado está
instalado en la mayoría de hogares y resulta muy necesario con la llegada del
calor. Pero que su uso esté muy extendido no significa que sepamos usarlo bien.
De hecho, la mayoría de hogares no lo utilizan correctamente y usan más energía
eléctrica de la que necesitan para refrescar su hogar.
Primer consejo: usar el aire acondicionado solamente cuando sea
necesario
Muchas personas dejamos el aire
acondicionado en funcionamiento todo el día e incluso nos adaptamos a la
temperatura que nos impone el aparato, llegando a abrigarse para soportar el
frío.
Segundo consejo: programarlo a temperatura moderada
Los expertos recomiendan una
temperatura de 23°
o 24°
grados para que sea suficiente, ya que temperaturas más bajas conllevan un
mayor consumo de energía y en consecuencia un mayor gasto.
Tercer consejo: instalar correctamente el aparato de aire acondicionado
Debemos procurar instalar el aire
acondicionado en un lugar alejado de
posibles fuentes de calor y con una buena circulación de aire. Además,
debemos mantener las entradas y salidas de aire limpias y sin obstáculos. Así
conseguiremos que el aparato deba hacer un menor esfuerzo para funcionar
correctamente.
Cuarto consejo: usar correctamente otros elementos del hogar
Para rebajar la entrada de calor
exterior y ayudar al menor esfuerzo del aire acondicionado, debemos hacer uso
de otros elementos del hogar. Por ejemplo, es recomendable usar toldos, persianas o cortinas para que
no entre el calor y así reduciremos en un 30% el calentamiento de nuestro
hogar.
Además, debemos aprovechar el
viento fresco de primera y última hora del día para ventilar la casa y mantener
una temperatura fresca sin necesidad de ninguna fuente de energía.